Tenga en cuenta:
La tentación siempre estará a la puerta, y debes elegir a quién vas a satisfacer: los deseos del Espíritu o los deseos de la carne.
¡La Biblia dice claramente que están uno contra el otro! La única forma de vencer esta lucha espiritual constante es alimentar nuestro espíritu todos los días, para que no seamos débiles cuando la tentación toque a nuestra puerta. Porque si somos débiles, siempre seguiremos cayendo y perdiendo la batalla.
¡Es un requisito! Si realmente tienes un verdadero deseo de crecer en el conocimiento del Señor y de satisfacer verdaderamente el corazón de Dios y sus deseos para tu vida, debes buscarlo de acuerdo con Sus normas. Debes tener oído para escuchar lo que Él quiere hacer en tu vida.
Sócrates dijo una vez:
“La vida no examinada no vale la pena vivir.”
“La vida es un regalo de Dios; es ciertamente hermosa, pero nosotros, los seres humanos, ¡debemos aprender a vivir!” – Arélis Marte
Finalmente, terminaré con la siguiente oración:
Querido Dios,
¡Gracias porque eres nuestra confianza! Estás por encima de toda circunstancia y tormenta. Eres nuestro último refugio y confianza. Te agradecemos por tu protección, tu amor incondicional por nosotros y tu fidelidad. Enséñanos a ser leales a tus mandamientos y deseos. Queremos ser vaso de honra, instrumento de justicia-haznos una ofrenda. Crea en nosotros un corazón limpio y renueva un espíritu de lealtad en nosotros.
-Arelis les desea un bendecido día.